De allí el viaje lo continué hasta Quito, joya del arte religioso barroco-jesuítico y franciscano. No sé si son más admirables sus ruinas, sus templos, Catedral, plaza de armas....o el museo que existe en Cotocollao, de las cabezas reducidas por los jíbaros.
Y por fin me asiento en Lima... en busca de trabajo, vivienda y "soles" para poder iniciar el nuevo trecho de mi vida.. que pude iniciar gracias a la ayuda otra vez de los jesuitas peruanos.
Sus ánimos, sus orientaciones para buscar trabajo y soporte económico fueron fundamentales para "echar pa lante".
Mi llegada al aeropuerto Jorge Chávez de Lima se produce el 3 de noviembre del mismo año 1973.
A los pocos días, y después de probar fortuna como vendedor, agente comercial, orientador de equipos de ventas... por fin se me abre una puerta -dura y grande puerta para franquear en el Ministerio de Educación, en la Plaza San Martín.
Tengo una entrevista con el Director Gral. de Educ. Laboral, de ahí me presentan al Ministro de Educación (Coronel Morales Bermúdez) quien en pocos días me confirma la aceptación para el cargo de Técnico Superior para la Dirección Gral de Educación.
En cuanto firmo el contrato y cobro mis primeros 600$USA llamo a Linda a París. Pero esto ocurrió en diciembre, justo antes de Navidades.
Había encontrado ya una habitación con derecho a cocina en el barrio de Miraflores (pijo de verdad), un poco apartado de la mugre provocada por la calima persistente y tenaz del
centro de Lima durante todos los meses de marzo hasta diciembre. Le digo que ya puede venir, que saldremos adelante y que juntos lo haremos mejor!!
¡Qué difícil es decir todo esto y mucho más por teléfono!!
El trabajo en la DIGEBAL (Direc. Gral...) interesante, apasionante, distraído y creativo. El grupo de trabajo super interesante.
Hasta uno se olvida de los terremotos, que los hay, muy frecuentes y fuertes.
PD. Todas las fechas las tengo ya ahora contrastadas por el pasaporte, inmigración, contratos de trabajo... y es importante saberlo ya que Pinochet, en la vecina república chilena ya hacía de las suyas y esto nos afectaría a nuestra permanencia en Perú y por supuesto a nuestro trabajo.