miércoles, 30 de septiembre de 2020

La llave que debería abrir todas las puertas


  Ha estado en todas las casas que hemos vivido los dos. Siempre nos ha traído suerte. ¿Os acordáis que os hable de ella hace pocos días? 



Y el santuario de Las Lajas en Ipiales donde estuvimos unos días y donde Clemente  nos entregó la llave de medio metro:






lunes, 28 de septiembre de 2020

CONTINUAMOS POR LA PANAMERICANA

 La cordillera occidental se subdivide en  occidental y central. La panamericana parece tener ciertos reparos de adentrarse  en la central y decide bordear, sin ser muy atrevida, el camino entre ambas . Las ciudades y los pueblecitos,  la frondosidad,y la alta humedad por la noche  hacen que el viaje sea un poco más lento.

Pero visto lo que ya hicimos, pensamos con razón que no iba a ser muy diferente.

Un frenazo, un frenazo de los buenos, ya en plena noche nos despierta de nuestros sueños y suposiciones.!Buenas noches señores¡ Iba armado con un fusil de repetición, llevaba un uniforme que parecía militar. Se pasea por el pasillo central del autocar; una vez, dos veces, hasta tres veces y aparece otro "soldado" en la escalera del bus. "que bajen todos los hombres, ya pues"¡ Bajamos; !todos  parados ¡junto al bus. Manos a la cabeza. Cacheo general, uno a uno.. y  suban todos. Prosigan el camino no les molestarán ya más.

Silencio... cuchicheos... siempre es igual... buscan a alguien ... no paran hasta que lo encuentran. Son paramilitares, no recuerdo que grupo. 

A mi me entró sudor frío; a Linda un tremendo dolor de barriga y un gran malestar. En Manizales, el conductor para un rato , yo compro una especie de orangina, Linda no quiere nada. Se encuentra traspuesta. Yo siento unos retortijones y otro caballero también. En Caldas le pido a gritos que pare que no aguanto. Se lo suplico, le imploro.... Y para. Voy directo al baño  y abro y oigo:!pase , pase, no se incomode¡ eran dos WC en la misma habitación sin pared ni cortina pero con  unos  olorcitos a mie......

Por suerte fue una vez y no más. Linda lo pasó peor. Al llegar a Medellín y bajar para cambiar de autobús se dio cuenta de por qué se encontraba tan mal.

Mientras bajaban los bultos y las maletas (14) se pudo poner un poco en forma. 

Teníamos que esperar unas 6 horas hasta el próximo enlace. Un hombre con botas de montar a caballo, sombrero de ala ancha, chaleco de cuero, pantalón  vaquero tenía entre sus manos un cuchillo-navaja, y mientras se limpiaba las uñas nos observa atentamente.

Desean entrar a asearse un poco en el interior? Claro ¡ No se preocupen yo les cuido el equipaje. El conductor ya me avisó. !"son muy buena gente"¡... Y nos fuimos, nos duchamos, desayunamos y al regresar el mismo hombre estaba aguantando la misma columna, los pies cruzados , la navaja entre las manos, y las maletas estaban todas, en el mismo sitio, menos una que la movió de lugar porque molestaba a la gente. Le abonamos lo que nos pidió, a tanto por bulto - pero sin abusar- y nos ayudó a subirlas al nuevo autocar para enfilar ya hacia Cartagena.

Dejamos ya los Andes , que se pierden poco a poco en la lejanía, incluso el nevado Ruiz, hermoso y solemne hasta en la lejanía, y observamos un hermoso y fecundo  valle y una ancha planicie  que nos anuncian la llegada a nuestro fin de viaje en América.

Atrás queda Quito, Cotocollao, amigos que duran para siempre, volcanes majestuosos que con su sombra nos protegían muy especialmente en Quito el Pichincha, el Cotopaxi...

En el hotel nos esperaban y nos hospedaron en una hermosa habitación, no sin  antes ofrecernos uns refrescos tropicales... que nos sentaron, para repetir... y repetimos.

El buque no recuerdo el nombre y no encuentro las cartas de la comida de abordo. Pero era o el DONIZETTI o el VERDI.  El trato era excelente, y los cuidados y atenciones por parte de la oficialidad y del mismísimo capitán excelentes.

domingo, 27 de septiembre de 2020

DE IPIALES A CARTAGENA DE INDIAS

 Los Andes  con toda su inmensidad,  que le permite albergar, entre las dos cordilleras oriental y occidental , una tal variedad de paisaje, de valles frondosos , picos escarpados, de volcanes impresionantes como el Cotopaxi, o el Pichincha bajo cuya protección estábamos en Quito, vegetación exuberante y caminos , sí caminos infinitos que cruzan sendas, ríos, planicies, precipicios, cascadas de agua e innumerables loros, guacamayos, monos... que hacen del viaje una auténtica nueva vivencia de la vida.  Grandes plantaciones de platanales, aguacates, frutos de la pasión, mangos, papayas y por supuesto la yuca, y también la coca.

En Ipiales ya nos habían reservado trastero del autocar para poder meter los catorce bultos y maletas, contando la llave de bronce que abriría casi todas las puertas, mas una máquina de coser" portatil", pesaba unos 6.00Kgs. y que Linda utilizó  para toda la ropa que hacía para nuestros hijos y para ella misma durante casi toda la vida vivida en Cataluña, hasta que ya la pobre se   fundió literalmente, hace unos pocos años. Y el pulso y los temblores de la mano le impedían  ya controlar la máquina o hilvanarla. Fue la primera gran  experiencia que tuvo sobre su mala  salud. Lloró y mucho. Y ya no intentamos arreglarla¡ Un día, después de pedirle permiso , y sin que se diera cuenta  la hice desaparecer. Compramos otra con mi hija pero  a duras penas lo consiguió, y ya no quiso intentarlo de nuevo para no tener otra decepción . 

A lo largo del viaje nos dimos cuenta de que los senderos y caminitos del indio permiten llegar a lugares a los que después llegaríamos nosotros "cansados" de  tanto dar vueltas y revueltas por la panamericana y sus desvíos para llegar a las más variopintas ciudades y pueblos. Y los nativos no van con las manos en los bolsillos, Si no llevan la guagua a la espalda llevan fardos de leña o productos del campo para llevar a vender o hacer trueque por productos de los que carecen.

Aquí el chófer no se dormía, nosotros tampoco por los nervios de ir a lo desconocido.

Al pasar algún poblado, sin parar en él, Linda se dio cuenta de algo que después parece ser normal: Si por la carretera cruzas un poblado que hay gallinas sueltas o cochinos paseando, si suena el claxon, indefectiblemente las gallinas y los cochinos cambian de lado, y si vuelve a sonar vuelven a cambiar, alguna gallina muere al segundo intento, no precisamente de infarto aun estando a los 3.000 o 3500.mts. 

Pasamos por pueblos como Otavalo , Ipiales en Ecuador,  Tulcán, Pasto, Popayán todos en plena cordillera occidental de los Andes. 

Nos habíamos dormido, cansados ya del trasiego anterior, y porque los asientos eran bastante cómodos. 

Después Cali, hermosa ciudad, donde paramos el tiempo suficiente para comer, estirar las piernas y confiar nuestro equipaje al conductor del autobús. Cumplió, no se movió de la estación de autobuses y le dimos la propina merecida.

Nosotros respiramos un poco más tranquilos, aunque faltaban unos mil quilómetros para llegar a Cartagena. 

No recuerdo la hora, pero ya pasadas las 15.00 16.00 horas  reemprendemos viaje .Faltan todavía muchas curvas, cuestas, valles y ...gallinas. y algo más .

sábado, 26 de septiembre de 2020

OLVIDOS IMPERDONABLES EN ECUADOR

QUITO ES UNA CIUDAD COSMOPOLITA Y MUY BELLA. HAY QUE DECIRLO. Y el tiempo que estuvimos lo disfrutamos de lo lindo haciendo nuestras travesuras de enamorados.

 Comidas típicas quiteñas en restaurantes "ad hoc", siempre acompañados.

Recuerdo nuestras excursión a "aguas Calientes" donde nos bañamos en una charca  de agua caliente, procedente del Pichincha hasta el que nos escapamos un día con la excusa de dar una conferencia a los padres, y unas orientaciones sobre alimentación de los más pequeños por parte de Linda

Excursiones a la "mitad del Mundo", en la línea del Ecuador.

Visita al museo de  las cabezas reducidas de Cotocollao.

La travesura de "robar "250gr. de jamón serrano de jabugo en el supermercado" la favorita " especialmente diseñado para extranjeros. Pero para nosotros era carísimo.

Nos salía más a cuenta comprar en el mercado central de Quito, muy bien surtido , especialmente en marisco y pescado. Y en las tiendas "colmados" de Cotocollao, donde la carnicería tenía la ternera abierta en canal colgando de la pared y te ofrecía la posibilidad de escoger la parte del animal que más te gustaba. El precio siempre era el mismo 14 sucres el kg. 

Eso sí al llegar a casa limpiarla y ponerla en la nevera que ya habíamos comprado. 

Linda era increíblemente experta en las partes de la ternera y para qué eran mejores, aunque le costaba mucho tener que limpiarla, y yo era y sigo siendo un desastre.

Invitaciones a casas de padres de familia y muy especialmente  a la de la familia Argüello. relojero de  profesión. Y de familia encantadora. Su mujer dedicada a la familia (5 hijos) y siempre con tiempo para acompañarnos.

En el colegio a la hora de descanso arreglamos con la sra. que cuidaba y limpiaba que preparase unos chicharrones  y el director del colegio"DEL HIERRO PORTILLA" ofrecía un "guisqui"  que estaba incluido en los gastos de "atenciones" que pagaba la Fundación. ¡ No estaba tan mal!

Los taxis al centro también estaban a cargo de la Fundación, ya que me insistieron en no coger los"guaguas" para ir al centro. Y así lo hicimos.

La verdad es que vivíamos a cuerpo de rey, ahorrábamos mucho, conocimos unos catalanes panaderos de oficio  que también habían salido de Chile y tenían la intención de regresar. De hecho se establecieron más tarde en una panadería frente al mercado de Sarriá, y allí nos encontramos. Era la familia FRECHIN.

Lástima  el Pincochet de Chile y el veto mío en la Fundación MENA-DEL HIERRO PORTILLA, ; económicamente no nos podíamos quejar,  hasta Linda daba clases en el parvulario francés de Quito.

De ahí nuestra relación con el embajador francés. Qué persona más servicial, atenta, generosa y buen consejero.

Me he desviado de la línea que me había trazado, pero una cosa trae la otra.

La próxima entrada será el Trayecto IPIALES - CARTAGENA DE INDIAS.


viernes, 25 de septiembre de 2020

VIAJE DE REGRESO A ESPAÑA

 La camioneta con matrícula diplomática espera junto a la puerta de casa en Cotocollao (Quito-Norte). El señor Clemente Argüello (presidente del AMPA) y algunos padres más  están con nosotros.

Ya es de noche en Quito y hace frío. Hemos vendido todos nuestros enseres, y lo que quedaba , ahí se quedó.

Cargamos los catorce bultos, nosotros dos y el chofer. Y en la cabeza las palabras  del embajador: Ne  salgan del coche en la frontera ni para "pisser",  ¿Se entiende no?.

Quito, Otavalo, Ipiales - parada obligada, mostrar los pasaportes y el Libre Paso del coche diplomático, con una carta del embajador por si fuera necesario. Pasamos largo rato, bastante frío, y cierto miedo. Pero estábamos los dos juntos y en "territorio francés". Silencio, noche fría,. estrellada, y la barrera fronteriza a menos de 50 metros. Sale  el policía de fronteras, mira dentro del coche con una linterna... ¡Buenas noches señores! prosigan el viaje y vayan tranquilos.

Y así lo hicimos y además con la tranquilidad de saber que lo único que había hecho era oponerme a una inversión millonaria en el Centro de Quito,  para que cuando diera beneficios se invertirían en el Colegio. Se trataba de una inversión inmobiliaria y en una fábrica de alfombras quiteñas. Una auténtica mafia, que usaba la Iglesia y la Educación de paraguas.

El embajador y el Director del Colegio La Salle , que estaba muy cerca, y que se hizo también amigo, habían contactado con la residencia de las monjas, que ya nos estaban esperando, con la cena, habitación con baño y ducha . Y nos sorprenden: Mons. Romero, arzobispo de Quito, también les había llamado y pedido que le informasen cuando llegásemos.

He olvidado decir que ya en Quito nos dijo que gracias a nosotros habían descubierto  el pastel de la  Fundación, y que la iban a denunciar y retirarse de la Junta Directiva. Sabían de las buenas intenciones de la Sra. Isabel del Hierro - la fundadora- , pero ya dudaban de los herederos.

Además al formar parte yo de la Directiva Nacional de Educación Cristiana, iba teniendo demasiada influencia por las charlas, conferencias, reuniones con otros directores, pero... me había olvidado de una pequeña cosa sin importancia: el Subsecretario de Exteriores que daba largas a la residencia de Linda, era hijo del hermano mayor y Presidente de la Fundación.

¡Realmente el mundo es un pañuelo; y a veces un nudo del que es casi imposible salir!  Pero salimos. Aprovechamos para descansar, ordenar papeles, vender y regalar libros de teología a las monjas que estaban ávidas  de novedades.

Ellas cuidaban del Santuario de la Virgen de las Lajas, que ciertamente nos protegió y mucho. Desde allí empezamos a escribir a España a Barcelona particularmente avisando de que íbamos para allá, a amigos y también a mis padres. Linda hizo lo propio con sus padres y con su hermana Augusta, pero faltaba todavía atravesar por la ruta panamericana los 1500 kms. que nos faltaban   para llegar a Cartagena de Indias y embarcar rumbo a Barcelona, no sin antes "pasearnos "con nuestros catorce bultos por toda la cordillera occidental de los andes.

Desde Quito nos avisaron que Clemente y el Director de la Salle venían a Ipiales, que nos querían ver antes de irnos. 

Clemente nos trajo un regalo: una llave de bronce de medio  metro  para que nos abriera todas las puertas posibles. Cumplió la llave su encargo menos en un caso, que ya contaré. El Hno. de la Salle  dijo que tenía que ir a Roma en un año y que nos haría llegar una bendición apostólica.  Esta llave todavía está colocada junto al recibidor, se la dio Clemente a Linda , con un cariñoso beso y un gran abrazo.

Tenían  que regresar a Quito. Comimos un pollo a la brasa, grande y exquisito y nos "juramentamos " para vernos de nuevo.

No os extraña que nunca hable del embajador español ni en Lima ni en Quito?... como si no hubiera, haría el mismo efecto: NADA. 


martes, 22 de septiembre de 2020

UN EMBAJADOR FRANCÉS PREOCUPADO POR LINDA

Después de la Kermesse y de dormir "la mona" , Linda se puso como todos los días atrabajar de secretaria del Colegio.

Al poco rato recibo un llamado telefónico del Presidente de la "FUNDACION " para recriminarme por el éxito de la Kermesse, ya que daba más entusiasmo entre alumnos y padres.

Resumiendo el colegio era una mera tapadera para cubrir  sus actuaciones económicas  en Quito- centro.

Se manejaban muchos pesos ecuatorianos, que deberían ser reinvertidos en el colegio. Y no se hacía, convocada un reunión del pleno de la Junta Directiva, en la que tenía derecho a veto a unos ciertos tejemanejes, Linda se dió cuenta de que me harían la vida imposible, hasta que decidiéramos marcharnos del colegio y del país.

EL embajador francés nos lo aconsejó en varias ocasiones; el Vicario Gral  y el Arzobispo de Quito también  nos recomendaban y ayudaban para que sin mover mucho ruido lo hiciéramos. Es más le dice a Linda que debemos irnos en el plazo d una semana o máximo quince días, el presidente del AMPA, me entrega una "boleta de contracaptura" porque sabe que la Fundación quiere detenerme con una boleta de captura. Y así estuvimos más de un mes con la tensión a flor de piel. 

El embajador de Francia nos ofreció su casa, y dice :"esta situación no es rara ni extraordinaria para los que van de buena ´fe y trabajan como se pactó". Yo les ayudaré. No se preocupen.

Como a Linda no le  daban la residencia, tuvimos a disposición el coche diplomático francés para poder salir del país, no sin antes cobrar una indemnización, el salario completo, la ayuda inestimable de Clemente Argüello, presidente del AMPA y del Vicario Gral. que bendijo nuestra unión (la de Linda y yo )  después de explicarle los avatares de Linda en Francia  , y los míos en Bolivia y como nos conocimos en París.

Monseñor Jácome (vicario GRal) y Monseñor Romero (Rector del colegio) , nos dieron todas sus bendiciones y fueron los que facilitaron nuestra salida precipitada de Quito. 

Hubo manifestaciones contra nuestra salida de los padres, de los profesores (excepto dos) y de los alumnos; el colegio había cambiado: un pequeño laboratorio, una nave rehabilitada para formación técnica, unos archivos, ficheros, biblioteca y una sala para que los niños tuvieran desayuno, sobretodo un buen vaso de leche y reparto de ropa de cáritas. Todo esto último a cargo de Linda. Las madres la querían con locura y le consultaban en privado de todo.

El ambiente del colegio cambió radicalmente. Un cura que era profesor de religión y de Lengua Castellana  celebraba una vez a la semana una eucaristía en una sala que habilitamos para multiusos y un padre de familia pinto  y decoró.

Pero las cosas "nuestras "! no se arreglaban¡. En medio de una asamblea de padres entra una persona y grita "la  casa del Director está ardiendo".El presidente del AMPA nos dice : ustedes dos no salgan, esto es mentira! Salió, lo iban a detener y el se identifica y se van . La casa ni ardía ni había nadie en ella. Y a partir de ahí íbamos siempre con la "boleta de contracaptura", que nos facilitaba el presidente del Ampa.

La residencia a Linda no se la dieron  porque no accedió a los intentos del Subsecretario de AA.EE. mientras yo - ingenuo- iba a buscar un sello del estado . Ahí fue ya la definitiva. Llamé al Vic. , Mons. Jácome y le comunique nuestra decisión de irnos los dos juntos pero con una indemnición. Con el dinero en el bolsillo (5.000 dólares, en billetes pequeños)  . El embajador puso la camioneta de la embajada, con chofer y la orden al conductor de no dejarnos bajar ni al pasar la frontera con Colombia  por Ipiales. Fue el chofer quien enseñó los pasaportes sin bajar y después de más de media hora dejaron pasar el coche sin molestarnos.

Estábamos en Colombia en Ipiales, alojados en una residencia de religiosas que cuidaban el santuario de la Virgen de las Lajas que me recuerda bastante a Covadonga. Pero en vez de estar en lo alto, está en un valle frondoso. La Virgen está pintada y esculpida en la roca del altar mayor , que hace de pared  del ábside.  La guardamos en casa. Ciertamente nos protegió.

Y nos permitió iniciar la nueva aventura: EL VIAJE DE REGRESO A ESPAÑA

lunes, 21 de septiembre de 2020

CURIOSIDADES VIVIDAS EN QUITO : BUENAS Y NO TAN BUENAS

 El condominio "El Carmen" era la urbanización donde vivíamos, en  COTOCOLLAO, un barrio a las afueras de  Quito Norte.

La llegada a Quito en avión es impresionante. El aeropuerto allá abajo, al fondo, como metido con calzador entre los Andes que lo rodean.

Pasamos tres  veces rozando las casas y una guardería que había junto al mismo aeropuerto, sin conseguir aterrizar. A la cuarta el piloto lo consiguió.

 Linda yo yo estamos cogidos de las manos, en silencio, como siempre hacemos cuando viajamos en avión.

Y a partir de ahí a descubrir  todo lo inimaginable.

Paras poder recuperar fuerzas y conocer la tierra que pisamos, el presidente de los pp.de familia del colegio, nos dejaron una casita de madera  en San Jacinto, en la playa del inmenso Pacífico,  solamente tenía estas peculiaridades:

-No tenía agua corriente. En marea alta, que la hay y muy alta  sentías el mar rozando el suelo de madera, el viento, que sabe soplar muy bien se colaba por las rendijas . Pero lo pasamos en grande, cogiendo cangrejos en la playa para cocinarlos- si no se escapaban- ,comprando pescadito a los lugareños para hacerlo en la casita-cabaña, y por la noche bañandonos desnudos en el mar. Nos traían el agua potable cada día en botellas grandes, y unos restaurantes ya apalabrados por el Clemente Argüello el presidente del AMPA. nos dejaban las duchas y los lavabos.Al mediodía comíamoss allí. 

Lo mejor el arroz chaulafán que iba siempre complementado por las moscas correspondientes. LO pasamos  bien de verdad. Todo era libertad, 

Para llegar a San Jacinto tomamos el autobús en Quito (2.800mts hasta los 0.0mts de San  Jacinto. Al poco rato subieron varios pasajeros al techo, y además llevaban bananas para vender  junto a la playa . 

Lo mejor es que el conductor, se estaba durmiendo y Linda  me dice "nos matamos si caemos  ahí abajo". Y tenía razón porque estaba tan profundo que seguro que te morías o del golpe o de hambre.  

Encontramos la solución: desde nuestro asiento, nos deicamos a hablarle, pero como no bastaba me atreví a hacerle cosquillas cada rato que daba una cabezadita. Y llegamos enteros nosotros, las bananas y toditos los que viajabamos.

La vuelta fue muy tranquila, siempre subiendo- con bananas también para vender en Quito.

La fundación nos recomendó una empleada, muy trabajadora, aseada y lista. Más que nosotros.

A los quince días de tenerla,  faltaba, arroz¿? azucar¿?, sal¿?, algún trapo de cocina ¿? y  descubrimos que por la pared del  jardín , cuando estábamos en el colegio,ella pasaba lo que necesitaba a su hijo, pero además colocó un clavito en la ventana del salón, para mirar si llegábamos ya, apartando un poquito la cortina. Así consigu.ió llevarse una cadena de oro, de la abuela de Linda, que este día no se había puesto en el cuello.

Peor fue el profesor de CC.NN. que le hice confianza. y se llevó mi cartera que había olvidado encima la nevera. Por cierto recuperé la cartera, el dinero y los documentos, ya que lo dije en claustro de profesores, y todos sabían que él había estado en casa el día anterior. Lo devolvió todo y se autodespidió.

Mas tarde  celebramos una Kermesse y me lo pasé tan bien que Linda me escondió porque  me puse como una cuba con los ponches, las sopas de vino,  y casi sin nada de comida. Hasta que no vomité no me dejó salir. Tenía que pagar a los músicos. Y les pagué. Por la noche Linda me dice: no te pongas así otra vez que eres el Director... y no estás muy guapo, Al dia siguiente era domingo  y descansamos y nos reímos.

Y recaudamos dinerto para el laboratorio de física y química . Valió la pena, para jodienda de la Fundación.

sábado, 19 de septiembre de 2020

MAS SORPRESAS

El clima en Lima es contradictorio para un europeo como somos nosotros.

Estamos en el hemisferio sur , . Esto es normal, siempre que estyás "debajo" del ecuador, pero en la ciudad de Lima- por lo menos esta es nuestra experiencia- vas preparada para invierno y te encuentras de lleno en el verano.

De hecho sólo cruzar la plaza de San Martín cogía una insolación, que mi Blanquita se volvió roja como una gamba. Tuvimos que aprender que el sol quema mucho y muy rápido en Lima. el verano, vino lo más sorprendente, a nosotros se nos hizo muy difícil la calima permanente, la humedad constante, la ropa no secaba,las calles se ensuciaban, el mercado estaba cerca, y en plena calle los chinos despedazaban el pescado en sus paradas (y no íbamos muy sobrados ), hasta que nos explicaron que podíamos ir a Chosica, a media hora  en colectivo y tendríamos un clima primaveral . Fue impresionante de hecho guardo en casa una foto en un parque en Chosica, los dos vestidos de verano  hecha el 23 de marzo de 1974.

Otra más: Linda encuentra trabajo en una marca limeña para escoger los modelos  que gustarían a las mujeres en la ciudad.

En realidad la firma existía, pero la finalidad no era tan clara como lo presentaron al principio. Y como Linda no es tonta descubrió el pastel que había detrás de "las modelos" y qué pretendían de ella además de seleccionar modelos, y "modelos".

Se autodespidió no sin antes exigir al jefe una reparación por  lo que pretendían.

Y otra: un día,  un lunes por la mañana , al llegar al MINEDUC. mis compañeros están silenciosos, y con las miradas en estado de alerta. Pasan un par de horas y llega en silencio la noticia, nuestra compañera de trabajo Chabuca ha desaparecido  sin dejar noticias. Es chilena, y PInochet busca opositores por donde los haya.

No teníamos teléfonos móviles. 

Nunca más supimos de ella. Y nosotros dos recién llegaditos empezamos a sentir un cuádruple miedo:

Ala Sra. Contreras,encontramos la foto escondido debajo de un cuadrito suyo. a la empresa de moda, al Gral PInochet , y a la policía que ya había pasado por casa en Girón Azángaro más de una vez.

Nuestra decisión fue rápida, buscar sin prisas, con cautela, salir de Lima   ¿hacia?.

Bolivia me estaba vetada por razones obvias, Francia no era viable todavía; España , dónde de España. Lo más normal hubiera sido a mi tierra, pero aunque escribía a mis padres, e incluso les llamé alguna vez, siempre era para echarme encara mi situación personal y mi convivencia con Linda.

La solución vino sola: pedí un permiso de15 días en el trabajo, y nos fuimos a Ecuador ya que me había llegado un enlace posible gracias a los jesuitas.

Linda estaba de acuerdo y no se sentía cómoda y tenía miedo de todo.

Pasamos unos días en Guayaquil, contactamos con el enlace en Quito y el resto ya lo sabéis por la primera parte de mi relato "MI VIDA". publicada el 30-08- 2008 con el  titulo:ENCUENTRO Y REENCUENTRO EN QUITO. También en las publicadas  3 -08 -2008 (DEL AEROPUERTO SIMON BOLIVAR AL ...) , el 11 -10 - 2008 (NOS DESPEDIMOS DE LIMA...)

No me gusta cansar al lector ,!amable lector¡ con repeticiones, . Perdón soy consciente que alguna se me ha escapado.

Hasta la próxima. Os aseguro que Linda me está ayudando mucho.  Repaso sus fotos y la veo, la oigo y la siento junto a mí. 

Como cuento con  ella, seguiré un poco más.

miércoles, 16 de septiembre de 2020

SORPRESAS SORPRENDENTES

 PRIMERA  SORPRESA. Linda Vd. debe ser la "primera", en casa, y con su marido. La bien cuidada, la que sale de fiesta y de paseo y la que recibe los regalos del marido.  La segunda es la que trabaja, limpia, asea, friega y está a sus órdenes para que el marido esté contento y feliz. Verá que bien lo pasaran ustedes dos juntos, sin preocupaciones.

A Linda no le pareció bien y a partir de ahí la relación fue ya más tirante.

Al cabo de unos meses descubrimos que en una foto nuestra clavaba alfileres. Pensamos "está medio loca". Pero cogimos un poco de miedo.

SEGUNDA SORPRESA. Fue en un viaje a HUANCAYO. Me pagaban el viaje en avión, pero , para no dejarla sola, me agencié para ir en autobús. La carretera sube hasta los 4.000 mtos. Y el oxígenos se echa en falta, y suerte que llegamos para ya bajar un poco en altura. Linda se ríe y me dice, tengo calor, sudor, un poco más monto un espectáculo. !Qué vergüenza!

 Aposentados en el hotel, un buen hotel, voy a dar las charlas de autoeducación e interaprendizaje, y a mitad de charla, siento que el suelo del salón se mueve porque un profesor estaba muy nervioso, después fueron dos, después la  lámpara del techo... y la conferencia se acabó.

Salí corriendo, Linda estaba en la ventana del hotel, espantada, un pintor colgado del andamio, oscilaba como un péndulo, Linda le gritaba, señor qué hace, se va a caer.

Subí corriendo y el abrazo fue más fuerte que al llegar a Lima. Era la primera vez que se enfrentaba a algo similar. No paraba de llorar, y al rato nos fuimos al mejor restaurante de la ciudad,

TERCERA  beber chicha auténtica peruana. La verdad es que no pudo con ella.

CUARTA En Lima al principio era tan  blanca- parisina`-ya la llamaban Sra. Blanquita y el cobrador del autobús se la miraba y le devolvía cambio hasta que decía! basta¡ pero como le faltaba vocabulario, retiraba la mano y decía merci, monsieur.

QUINTA otro terremoto en Lima mientras estábamos durmiendo.

SEXTA el gusto de comer en la calle,en los chiringuitos la más típica comida peruana... junto al hotel HILTON.

SÉPTIMA, vimos, sentimos que nos queríamos como nunca podríamos pensar. Qué suerte tuve que 

 Linda quiso compartir su vida conmigo Fue mi primer amor verdadero y mi único amor en mi vida.

Que pena que ahora nos ha dejado (pero está ahí) y todos los días nos habla.

PD/No creo que mañana pueda escribir y pasado mañana menos. Hará un mes que nos besó por última vez. 

Hasta luego.

martes, 15 de septiembre de 2020

LOS DISTINTOS ESTADOS DE ANIMO NO PRETENDEN SER CRONOLÓGICOS

 La avenida Mariátegui, en el barrio de Miraflores fue nuestra primera morada, tan morada que nos caímos de la cama de 135cms de ancho y rompimos el somier a los  pocos días de llegar. Pero el barrio es muy "chic".

Ella no llegaba a los 52 kg.,  midiendo 163cms. Yo también había perdido, comía lo justo para tener un poco de dinero para ser "espléndido" al llegar Linda.

Vista la delgadez mutua, y la distancia hasta el Ministerio, buscamos otra residencia, más adecuada  , más cercana y con cama más ancha.

L'Alliance Francaise nos ayudó; contactó con la señora Contreras, y nos fuimos al apartamento en unos bajos  de la calle Jirón Azángaro, en pleno centro de Lima, y muy cerca del Ministerio de Educación, del Mercado Central, de la calle Jirón de la Unión, en aquel entonces la más comercial de Lima Centro.

Salir de casa y cruzar la Plaza San Martín hasta el MINEDUC. no eran más de 10 minutos a pié.

Disponíamos de recibidor-saloncito-comedor (todo en uno), habitación grande, baño completo, ducha rudimentaria, cocina, y ajuar necesario-mínimo para la casa y cocina .

Me olvidaba Linda podía hacer uso de la máquina de coser SINGER a pedales, y una rudimentaria lavadora de ropa, que! lavaba.¡

Y aprendió a usarla para sus clases de corte, modelaje y confección que el Ministerio pagaba para la pareja del trabajador/a.

Tanta cercanía de casa al trabajo y el pase que le proporcionaron para entrar y salir, fue lo mejor de lo mejor. Las comidas en el despacho  mejoraron mucho y eran envidiadas... y después copiadas y preparadas  al estilo limeño. Linda siempre pregunta, prueba, intenta, resuelve las dudas y a comer  hasta ceviche de pejerrey.

Eran en general muy comprensivos, y más con las parejas de los funcionarios adscritos, como yo a la UNESCO, como técnico  en Educación.-

Los sueldos eran pagados regularmente  y siempre en dólares.  La vida empezaba a sonreirnos.

Fuimos a los jesuitas, cerca de la Avda. la Colmena para decir que ya no necesitábamos el dinero.

Todavía nos siguieron dando una ayuda de 200$ durante tres meses más.

Lima es una ciudad grande, muy grande. El centro de Lima, con su plaza de armas, el palacio del Presidente, , la Catedral y los edificios colindantes todos coloniales y muy bien conservados, son de admirar.  Pero tiene sorpresas que para un europeo te deja perplejo:

Los taxis-colectivos, con rutas fijas y compartidos por hasta 3 o 4 usuarios que hicieran la misma ruta , pero con paradas distintas. Los microbuses, los  buses y los taxis de pago.

Fue al bajar de uno de éstos  en la plaza San Martín, donde me robaron la cartera, con el  dinero y la documentación. La precaución de haber hecho fotocopias nos salvó .

A los tres meses  Linda ya  se despachaba con el castellano. Podía ir al mercado central,  Y seguir con regularidad las clases de corte y confeccíon. Que suerte de la máquina de la señora Contreras, Se hizo una mini-falda, cruzada con un short, una flada plisada que por supuesto se ponía, un  pantalón entallado y una blusa , que no llegó a terminar por la situación política -social. que se iba adueñando del país.

En casa era rara la semana que no venían compañeros míos jesuitas y ya no jesuitas. La policía se inquietaba  y nos hizo varias visitas ante tanto trasiego de personas en casa. Pero sin más consecuencias aunque la sombra del General Pinochet en Chile y la jefatura del Gral. Velasco Alvarado  y del  coronel Morales Bermúdez en Educación, se hacían cada vez más asfixiantes y poco a poco tensas.

Pero  el trabajo de nuestro departamento era muy bien visto ". La llamábamos a lo que imprimíamos METODO DE AUTOEDUCACION E INTERAPRENDIZAJE.  pensado particularmente para las zonas rurales y barrios marginales. Pero en casa la sra. Contreras le explicaba como tenía que vivir en Lima, para ser una "señora" . Y a Linda no le gustó, y esto no sentó bien a la sra. Contreras. Quizás Sherlo Holmes hubiera descubierto lo que había mucho antes que nosotros.

 


lunes, 14 de septiembre de 2020

UNA AUTENTICA ESCAPADA A SANTANDER Y LA HUIDA DE TODO Y DE TODOS

   Y por qué?

En la primera parte del blog expliqué al  detalle mi regreso de Bolivia, pasando por Corumbá, Baurú, Campo Grande, Sao Paulo, y Río de Janeiro; por supuesto siempre detenido y custodiado por  policías y militares, hasta la cabina del avión de Iberia.

Ya expliqué entonces todas las vicisitudes. No las voy a repetir..

Pero callé unas particularidades, que ahora desde la distancia temporal y desde la soledad , fallecida mi esposa Linda, ya no tengo derecho a callar. 

Quizás así se entenderán muchas cosas.

Yo supe, me lo contó el P.  Sugrañes, que mi hermano se había movido ante el Ministerio de AA.EE., que los jesuitas de Barcelona, y los de Brasil, también, aunque todo era muy lento y opaco. Recuerdo  la advertencia al llegar al aeropuerto: "no hables, no expliques".

Y en"mi casa " silencios, miradas y ninguna pregunta. Tenía que volver a la comunidad y como si no hubiera pasado nada.

Por otra parte mi hermana y su marido estaban en Santander, él haciendo las prácticas de medicina en el hospital de Valdecillas (mientras hacía , si mal no recuerdo el final de las milicias Universitarias y tenía la oportunidad de hacer una especialidad médica) - si me he equivocado ,perdón- pero lo cierto es que me llamaron para que pasara unos cuantos días con ellos, para  rehacerme de la crisis  con la Compañía de Jesús, conmigo mismo, con la soledad experimentada en Barcelona, y me fue bien, y se lo agradecí.

Debía volver a la parroquia de Montserrat de Badalona, y seguir como siempre siendo jesuita, y sin la comprensión de mis padres, ni de mi familia por lo sucedido con la revolución de Hugo Banzer.

Salí del piso de mis padres, me fui a Lauria 13 , y desde allí conseguí la parroquia de Anthony  y matricularme en la Ecole D'hautes Études de Sociologie, de la Sorbonne.

El viaje , en coche con mis padres y mi hermana Pilar, estuvo bien. Coincidió con el atentado de Munich  durante los JJ.OO. Pero llegamos a  Anthony  a la parroise St. François sin  más nconvenientes.

Poco antes  de salir hacia Bolivia , hacia Sta.Cruz de la Sierra, tuve la alegría de poder ser testigo de la Iglesia en la boda de mi hermana en al Parroquia de Sta. Ana de Barcelona. Y no sólo esto,  celebré la eucaristía y lo más sorprendente, iniciamos juntos el viaje de bodas hacia Madrid en su coche. Yo después seguí en avión hacia La Paz y Santa Cruz de la Sierra, y ellos su luna de miel. Se lo agradecí y supongo que ellos estaban contentos , pero un poquito fastidiados , pero lo hicimos así. Y llegué cinco  días después a Santa Cruz de la Sierra, donde ya me esperaban Luis Bach y Victor de Villasante.

Yo creo que de las tres situaciones que he comentado,  la celebración de la boda, el viaje juntos a Madrid, y el acogerme en Santander  ,vino el creerme con  la libertad de poderles explicar después, a los dos años, mi relación con Linda e ir a pasar con ella unos días a su casa. en Barcelona. Me equivoqué .

El choque fue tan brutal que, a los pocos días , como ya he dicho, tuvimos que salir de su casa en Barcelona (supongo que deben seguir ahí  todavía) y buscar el hotel . Nunca creí que esta situación podría llegar. Qué ingenuo. Y Linda me hizo confianza

Poco después, muy poco después recibí la llamada de París de Mme. Marlière, y después  mis padres me llevaron a recoger mis cosas, y yo fui a despedirme de Linda y explicarle lo de mi futura inmediata salida al Perú.
Pero que la llamaría lo antes posible.
Esto ya lo he contado hace dos o tres días.Y como ya he contado la llamé y rellamé, y el 28 de enero de 1974, ya estaba conmigo en Lima.


viernes, 11 de septiembre de 2020

LA ESPERA ETERNA

 

Yo no pude imaginar lo larga que es una espera de tres meses, y lo lejos que queda la voz cuando hablas desde la distancia y con tanta agua por en medio.

Y LO DURO QUE ES SALIR DEL HOSPITAL, SOLA EN PARIS. 

Su voz sonaba entrecortada, ESTABA LLORANDO, y qué menos podía hacer. Me había perdido y  sentía que no me volvería a ver jamás. 

Pero cuando conseguí el contrato en el Ministerio de Educación, la habitación con derecho a cocina y la residencia en el Perú, la llamé, le supliqué (lo estaba esperando) y acompañada de Colette tomó el avión destino Lima.

Había perdido mucho peso. Traía una maletita de viaje,  cargada de miedos y esperanzas, de dudas y temores, pero llena de amor e ilusión de poder comenzar la vida nueva juntos libres de  presiones´y dispuestos a todo.

Fuimos a Miraflores, y me pidió descansar, y durmió casi 10 horas seguidas.Me dieron permiso de dos días en el Ministerio y pude estar con ella. No paraba de llorar y reír, decía que soñaba y me pellizcaba  para ver si realmente estaba allí. 

Claro que estaba.¡

Yo iba ya al Ministerio en la plaza San Martín, pedí permiso para que ella pudiera traerme la comida y comer juntos en el despacho. !!!¡¡¡, Concedido¡  Y aquello fue la gozada en toda la oficina.. La DIGEBAL DIRECCIÓN GENERAL  sólo llegar Linda cambió de aspecto, Había alegría y sorpresas. Y se creó un clima de amistad y compañerismo increible.

Llega, me da un beeeesssoooo, blanca como una aspirina, recién llegada de París, hablando en portugués y en francés y buenos días en castellano. Puso un mantelito sobre la mesa de trabajo, sacó  dos platos, una fiambrera, con una ensalada, una cocacola, servilletitas, y un poquito de fruta.

Silencio, y todos salieron a la cantina a comer. Uno sacó un bocadillo, y se puso junto a nuestra mesa. Era Pepe Ortiz, después nos hicimos muy amigos.

A la semana de llegar , a la hora de  la comida, nuestro departamento era pura alegría, soporte, ayuda y amistad fuera del trabajo.

"Qué valiente has sido Linda!"  Cuánto debes quererlo para cruzar el charco, sin saber a dónde ibas, y esperando sólo encontrar a JoséMari¡ Pero él nos hablaba todos los días de tí. Te esperaba, y preguntaba cada día los vuelos; sí sí, pero me dejó tirada en París, tenía mucho miedo de no encontrarlo en el aeropuerto.

PERO AHORA YA NO LO DEJO ESCAPAR, NADA NI NADIE SE INTERPONDRA EN NUESTRO CAMINO.

Y así fué.

Qué días, qué noches, qué paseos por Chossica, a media hora de Lima. Ella empezó a tomar las riendas de la casa. Compraba el periódico y hacía crucigramas conmigo, preguntaba, daba pequeños paseos iba al mercado de Miraflores, y escuchaba el castellano aprendía a escribirlo,las "b", las "V",g y j...y los verbos. QUé duro pero con que ganas se ponía. Y lo sacó adelante.

Algunas noches la llevaba a comer a la "pensión Isabela" y preguntaba cómo se hacía un plato, qué era el otro.

Su carita blanca, y su mirada temerosa se fue transformando en una mirada que deslumbraba gozo y claridad y ternura.

Era pura simpatía y cariño hacia todos los que la iban conociendo.


jueves, 10 de septiembre de 2020

DESCLASIFICANDO HECHOS Y MEMORIAS

 

Siento temores y miedos de no ser fiel a la realidad del momento que intento explicar. No quiero traicionar la memoria que aflora vertiginosamente y a veces se para en un stop silencioso. Y en este momento ya no puedo seguir escribiendo.

Hoy estoy , me parece, preparado, aunque no soy escritor pero  sí que escribiendo me libero y pienso que otros pueden participar de nuestra liberación.

Mi estancia en París, mientras estudiaba, y desde el momento que la conocí y la amé varió radicalmente.

Me faltaba tiempo para tanta cosa: catecismo con los niños a las 7 de la mañana, la misa en la iglesia, las clases en la Universidad,  comer con Linda en el "restou" (restaurante niversitario)  hablar y regresar a Anthony, para esperarla a la salida del tren en Sceaux y decirle je t'aime a toujours. Regresar a la parroquia, hacer los trabajos de clase, reunirme con el párroco, y con feligreses. Y pensar en Linda.

Un día la convencí y vino a Barcelona, le dije yo, y conocerás a mi familia,particularmente a una hermana y un cuñado y tal vez a mis padres.  Vino en autobús. Y nos acogieron en su casa para poder conocerla mejor, y preparar a mi madre para la noticia. 

Estuvimos juntos unos días, e  incluso quedamos de acuerdo que subiríamos  al piso dejando como señal la luz del balcón, para evitar "tropiezos".

Yo entiendo que muchos se escandalicen, pero no puedo mentir. Era cura (jesuita) y quería a Linda con locura  .

Una noche, después de cenar , vino mi cuñado y nos dijo tenéis que marcharos de aquí, esto es insostenible, tu hermana se ha quemado haciendo un gazpacho, y al final, mamá se enterará.

Y nos pusieron de patitas en la calle con las maletas en la puerta de la escalera. Fue muy duro, entiendo que en su situación, y teniendo en cuenta la relación estrecha que creo que tenía con ellos, el impacto tenía que ser muy fuerte. Y lo fue.

Nos fuimos a un hotel en la Gran Vía y a los dos días regresó a París. Otra vez sola, y con una crisis interna muy grave.

¿Por que no cogí yo una maleta y regresé a París? Una  vez mas, por cobardía, y porque no me aclaraba en mi vida sentimental.

Hasta que un día recibí una llamada desde París que me trastocó. 

Linda estaba ingresada  muy grave y totalmente inconsciente. Era Mme. Marlière. Linda se había desplomado  al entrar a su casa.Cuidaba de ella todos los días.

miércoles, 9 de septiembre de 2020

PERO LAS CIRCUNSTANCIAS VAN MOLDEANDO LLENA DE CONTRASTES UNA REALIDAD

 Su hermana Augusta me llamaba la atención, igual que Colette sobre los problemas que tendríamos en nuestra convivencia. pero también reconocia que cada vez que nos veía juntos, nuestros ojos delataban el amor y la alegría de encontrarnos.

LLegaron las vacaciones de verano, y yo me decidí a dar un paso, explicar nuestra situación a mi hermana y mi cuñado, sin esconder nada. Yo creí que lo aceptaban y lo entendían y sobretodo nos ayudarían.

Pero las cosas se torcieron por un lado por ingenuidad y por otro por temores, por "el qué dirán".

Fue un mal trago, muy malo , que le hice pasar a Linda sin merecerlo. Ella confiaba en mi y yo no conocía la realidad de la presión y de "l'entourage" familiar.  

A los pocos días regresó sola a París. Los desencuentros familiares iban en aumento, hasta que un día decidí hacer dos cosas, una detrás de la otra:

Volver a París; Hablar con ella (lo hicimos en  las oficinas del banco), ; regresar a Barcelona , no sin antes explicarle a Linda que iba a poner tierra y agua por en medio, y marcharme HUIR  al Perú, para poder reflexionar y darnos un tiempo para decidir, lejos de las presiones  y sufriendo el distanciamiento .

Una vez allí, sentí dolor, angustia, no por  mí sino por Linda, la había dejado en medio de la selva parisina.

Y ella había confiado ciegamente en mí.

 Salí del aeropuerto de Barcelona el día 23 de octubre de 1973.  Y llegué a Lima 5 días después.

Los jesuitas me acogieron, me apoyaron y al mes ya conseguí trabajo, sueldo, residencia y una habitación con derecho a cocina en el barrio de Miraflores . 

Varias veces llamaba a Linda, cuando ya tuve garantía de poder vivir juntos . Ella tamía que yo le fallara otra vez Por navidades del mismo año, la llamé, le supliqué, y le juré que nunca más la dejaría y que pasaríamos la vida juntos, pero juntos de verdad y con hijos como ella quería con tanta ilusión.

Se dejó convencer una vez más y el 28 de enero de 1974  aterrizaba en el aeropuerto de Lima y salia por la puerta de primera clase , y me vio, y la vi. Y empezamos la vida juntos para siempre. Un compañero de trabajo, o, me acompañó al aeropuerto , con su coche, y no fuimos a"nuestra residencia" de Miraflores.

La distancia con el amor, si hay AMOR, se acrecienta. Y el cuerpo se llena de fuerzas , de  ilusión  y de ganas de estar y ser uno solo en dos.

Y así fué.

Durmió doce horas seguidas  Era la primera vez que cogía un avión, y lo hizo sola.  Tenía 30 años, y había puesto toda su esperanza en mí .Colette y George la acompañaron hasta ORLY. 

!cuanto dejaba en París¡¡ Qué se encontraría en Lima¡ 

Primero confusiones por su apellido y la ciudad. Segundo desconocimiento de la lengua. Tercero problemas en la aduana ya que tomaba "unos polvos blancos", para una llaga en el estómago ya cicatrizada, y lo último se encontró conmigo, con mis brazos, que la ayudaban a caminar, estaba muy delgada. y agotada. El compañero brasileño le decía, deja las angustias, las tristezas, descansa, que se ve a distancia lo muchísimo que os queréis.  

!este es el nuevo mundo, y aquí empiezan ustedes la nueva vida.¡

martes, 8 de septiembre de 2020

LA VIDA YA NO SIGUE IGUAL


ME DOY CUENTA QUE ESTOY ESCRIBIENDO , COMO SI FUERA ELLA.

¿Tengo derecho a hacerlo?

Me vienen tantas palabras y vivencias, que sin darme cuenta lo hago. De todas formas así siento que es Linda quien cuenta y habla,  esto me da ánimos para seguir y recordar con más fuerza y sobretodo autenticidad.

Sigo.

Cada encuentro era una nueva ansiedad y angustia, reflejada en su hermoso rostro , pero sus bonitos ojos tornasolados, se volvían cada vez más  tristes, llorosos; yo por mi parte llevaba dentro la lucha interna de mi propia existencia.

Hice un descubrimiento: cada vez que me encontraba , paseaba y sobretodo hablaba con Linda , mi vida alegraba y las ganas de vivir reverdecían. Y Linda me decía lo mismo, y me preguntaba cómo podríamos juntar nuestras vidas, ...

Lo que sí estaba claro era que vivir unas dobles vidas, de apariencia y medio furtivas no podía ser.

Yo hablé con un jesuita, autoridad eclesiástica en Bolivia, dentro de los jesuitas, y me puso en paz con Dios, con la Compañía de Jesús y conmigo mismo. Fue en un café de los Campos Elíseos.

Increíble, pero dejé de tomar pastillas para el insomnio, la digestión, la acidez, la presión. Un solo beso de Linda, una sola mirada, y una palabra de ella, eran más que suficientes.

Linda habló con su hermana Augusta(DEP), y con Colette  Vanderhagen y George Bernardin, que regentaban una óptica en la rue de Rennes.  pero vivían muy cerquita de Chartres. Más tarde estuvimos en su casa y en el apartamento que tenía Colette en la rue de Vaugirard, en Paris 7èm ou 6èm. Seguro que hay una persona que se ha de acordar de esta calle, allí estuvo un verano. Con Colette cuando todavía vivían sus padres, !qué buenas personas y qué honestas¡ Los dos murieron de cancer, Pero  la amistad con Colette, Linda y yo la fortalecimos profundamente.  Fue de gran ayuda para saber a que atenerse si quería casarse conmigo ella nos aconsejaba no venir a Barcelona . No se equivocó en nada.

Nunca la engañaron, siempre la acogieron y la estimaron mucho. Qué lastima cuando los amigos están tan lejos y no sabes a quién recurrir cerca.

Pero nos queríamos, y esperábamos superar todos los tropiezos.

Linda decía sólo pienso en tí, ven a buscarme al trabajo y comemos juntos, y lo hicimos más de una, dos .... veces. Reía más que comía. Como el dinero era escaso, comíamos en los selfs services, o en el RESTAURANTE UNIVERSITARIO  aprovechando mi carnet de estudiante de sociología en la Sorbonne, En l'ecole  d'Autes  Etudes, cerca  del "pont d'Alma". 

El día que me cayó el vasito de vino dentro de las lentejas, Linda reía sin parar, yo rojo de vergüenza, no sabía qué hacer , y me las comí, y todavía reía. las escaleras del metro eran interminables, los segundos de espera eran horas, !largas horas¡

Y desde entonces me dí cuenta que había complicidad.   Y mucho amor y una gran generosidad  de su parte.He de reconocer que yo fui  un poco egoísta, aunque me parecía que no.

lunes, 7 de septiembre de 2020

HOY SÍ PUEDO, PERO ME FALTARÁ TIEMPO

 El calor humano, el sentirnos arropados mis hijos, nietos y mi yerno y mi nuera, y yo mismo por una comunidad de fe, esperanza y estima, es algo que es indescriptible y yo mismo me parece que estoy despertando de un sueño, que no podía ser realidad. Y lo fue,

Linda estaba presente, sus cantos,  tan queridos , AVE MARÍA... , SI YO NO TENGO AMOR, Y  muy especialmente TU HAS VENIDO A LA ORILLA, la había cantado tantas veces y con tanta ilusión, que parecía que estaba ahí sentada entre nosotros, y mirándome, mirándonos, y sonriendo "ha dicho nuestro nombre", y dejó en la playa su barca, sin oro ni espadas, tan solo cargada de amor, de entrega tanto amor, tanta y cariño, y también tan to perdón, que su aliento, y su vida estaba realmente entre nosotros.

De repente desapareció, se calló, yo la veía sentada, pero su iglesia de Vista Alegre, y mucha gente la buscaba... yo les di un recordatorio, mis hijos también. El cura la recordó, Javier con su guitarra, como hace más de  de 35 años  hizo lo imposible, y los fieles amigos y algunos desconocidos para mí y otros no recordados, nos acompañaron mucho mucho rato. Y cantamos  alto y fuerte. Y  la Sra. ILUDI, me abrazó, lloró, su hijo había muerto hacía dos años, pero me entregó una foto de la primera reunión que tuvimos hace ya 30 años para hablar de la construcción del nuevo templo, pues donde estábamos , los bajos de la escuela  se había hecho muy pequeña. Gracias

Mis compañeros de antaño Victor Villasante , su esposa y Luis Bach, también estaban y nos reconfortaron.

Linda estaba feliz, al fin y al cabo tanto Víctor como Luis fueron durante muchos años "los tíos", que en mi tierra en la práctica no tuvieron mis hijos.

Y a LINDA  la consideraban como una hermana. Y Victor muy especialmente lo sabe.  No solamente haber sido jesuitas une, también el respeto, el apoyo, las bromas, las historietas y el tiempo. Es increíble he descubierto que el paso del tiempo aumenta la proximidad, acrecienta los recuerdos, engrandece la amistad.

La distancia física no separa; une entrañablemente, acrecienta los buenos recuerdos y mantiene vivos los trances dolorosos inevitables.   Ayer se lo decía a Linda, y ella me escuchaba. Le he dado un beso y nos hemos dormido.


sábado, 5 de septiembre de 2020

HOY NO PUEDO ESCRIBIR

 Lo siento, preparando la entrada de hoy me he puesto a mirar fotos, repasar canciones de las que le gustan a mamá y me ha dado cuenta del caudal de riqueza que me aporta, 

Espero que mañana o pasado  podré hacerlo, después de participar, con nuestra presencia y la de todos aquellos  que la querían, y lo están demostrando, con hechos, mensajes, llamadas, abrazos y lágrimas de pena y de amor en la distancia, de la misa en Vista Alegre, en la iglesia de Ntra. Sra. de Montserrat, de Castelldefels.

Y muy especiales gracias a Javier Clemente. Gracias. Nos veremos ,si Dios quiere, en la Iglesia que nunca podemos olvidar. 

Un abrazo a todos

viernes, 4 de septiembre de 2020

VIVIENDO LA ALEGRÍA DE VIVIR TRABAJANDO

 Cada 20 de setiembre, como para  cualquier  aniversario de mis hermanas y hermanos , mi madre nos daba algo especial para comer; en Portugal solía ser  un huevo duro, o una sardina entera, y una patata, , como cosa extra. El pan y la leche no solían faltar nunca, algunas veces el bacalao.

Y éramos felices y reíamos y jugábamos, ¿por qué no?

El 20 de setiembre de 1959 fue algo distinto, porque comida, en Francia ya no nos faltaba, du fromage, du beurre, du pain, du lait a volontée,de la viande de boeuf, même de croissants, hasta sardinas saladas,  y  huevos.  des saucisses d'estrasbourg, .. .

Pasó que tenía que ir a la escuela, desde el 15, y mis padres decidieron que tenía que trabajar para aportar algo de dinero a la caja familiar. como iban a hacer los que eran mayores que yo , 4 , todos chicas. Y así fue. El 10 de octubre de 1959  con 15 años recién cumplidos, empecé mi andadura laboral sin parar nunca (no había paro después de la guerra mundial), y poco a poco me fui espabilando en el francés, en mis derechos y mis deberes, y en vivir una vida muy distinta, y aunque separada de la familia toda la semana, me llenaba de experiencias y vivencias...

Portugal estaba ya muy lejos. Allá los ciudadanos tenían miedo de la policía, había que ir a colonias de Mozambique y Angola y las mujeres se quedaban solas con los hijos. Por esta razón había tanta emigración clandestina "a salto de mata" 

En Francia la policía siempre pasaba por nuestra casa, nos explicaba qué hacer y cómo pedir, ofrecían su protección. Les gendarmes siempre estaban para cualquier necesidad. 

Y mi  madre les ofrecía un café caliente hecho con malta, pero era caliente y en St. Nabord y en Troyes en invierno hace mucho frío.

Mi madre descubrió los puerros, las endivias, la crema vichisoise, hacer flanes y de"ris au lait". Cuanto trabajo bien hecho de las asistentas sociales, de los médicos rurales , de las maestras, de los vecinos, cuánta ayuda recibimos, y cuando llegó el momento de una necesidad urgente, siempre había alguien a nuestro lado. NO teníamos teléfono pero la vecina nos llamaba,  el cartero nos traía las cartas, claro ,los documentos a firmar para la seguridad social, y si no podía ,le maire estaba al quite, y al año teníamos teléfono  pero nos faltaba el  francés.

Y así nos dimos cuenta de la importancia de hablar, leer y escribir (¡qué difícil ), que raro  y que lío de acentos,diptongos, dígrafos  y las RRRRRR, guturales, las "en" que se pronuncia ni en ni an.

A mi la curiosidad y mi frenillo en la lengua y las ganas de salir adelante y dejar la miseria atrás y no sólo sobrevivir, sino VIVIR libre, me lo hicieron todo más fácil.

Y la gente (y los jóvenes) que nos animaban. En un pueblo de unos 200 habitantes, si llegaban, aparecieron 10 chicas y un chiquillo. Esto era fiesta y alegría los domingos después de misa y también los sábados por la tarde. Era entonces cuando regresábamos al redil   familiar.

Empezaba a ser una nueva vida, llena de futuros y de esperanzas. Y se fue realizando, poquito a poco.

.

miércoles, 2 de septiembre de 2020

Y A DESCUBRIR (UN POCO) LO QUE FUE LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL

La casa de Saint Nabord, era alargada, muy alargada, y al final había un edificio todo de madera para guardar la paja y sobretodo la madera. 

Perdón esto ya lo había dicho antes. Pero era una cosa importante, pues según me dijeron allí se escondía la gente, las ratas para comerlas y la leña  durante la guerra.

Una cosa me impresionó mucho : un monolito grande, muy grande a la entrada,  del pueblo sobre la route de Paris con el nombre y apellidos de todos los muertos por la guerra  y que eran del pueblo. De hecho esto sucede en la mayoría de las poblaciones  en la región  "Champanye-Ardennes.

Sólo faltan los que traicionaron a Francia , muchos de ellos se hicieron ricos  más tarde con las propiedades. De hecho en Saint Nabord, Torcy le petit, Torcy le gran, Arcis sur Aube, la población quedó diezmada, las casas abandonadas y después "ocupadas". Los puentes se destruían de día por las bombas y se construían de noche por la "resistence"!.

Pero a lo que iba, para nosotras las explicaciones, no acabábamos de entenderlas. Yo tuve suerte con la familia en la que estuve varios años, pues me lo decían a mí, y para que yo lo entendiera, Más tarde fui conociendo a gente que estuvieron en los campos de concentración "franceses" del régimen  de Vichy, del mariscal Petain. Y también de los alemanes y también exiliados españoles de Franco y de Salazar de Portugal. Mis padres ayudaban a todos a buscarles vestidos, comida , trabajo y papeles. De esto me encargaba yo (ya hablaba y me espabilaba  en francés). Qué tiempos, ¿Qué pensarán mis hijos y mis nietos cuando lean estas cosas?.

Cada semana , durante bastante tiempo, el dueño de la fábrica se dedicaba a mostrarme el mapa de Francia, compararlo con Portugal, y explicarme les départements, les regions, les cantons (qué lío) y una palabra nueva que poco a poco fui asimilando profundamente , LA DEMOCRATIE para  CONVIVIR  en paz.Después vino la clase de cultura general, que yo después tenía que explicar a los niños, entender el clima, y les "manières" et les expressions francaises que eran vulgares, o  educadas.

A un señor no le podía decir, !EH, écoute, dis-moi, debía decir monsieur, síl vous plait, pourriez -vous me'expliquer...?

A mí esto me ayudó mucho para adentrarme en la verdadera cultura y el "savoir faire" francés. Si a todo esto le añadía las revistas d'actualitées  y los periódicos , poco a poco era capaz de interesarme y preguntar , como los niños, "et pour quoi? Aprendí a decir CHOUCROUTE,  y sobretodo al ir a una tienda, saber decir siempre ! Bonjour madame, bonjour monsieur, s'il vous plait  ...   Y al final, siempre !Merci madame, merci monsieur ¡ Creía saber en mi interior que estaba allí para quedarme¡

Me sentía cada vez más francesa y nunca renegaba de mi origen portugués. Y recibía alabanzas por lo uno y por lo otro.

Reconozco que el francés, desde que lo entendí y sobretodo desde que pude expresarme con cierta soltura, me encantaba. Y los cantantes, y las cantantes, y la música popular. Y todo.